Se podría decir, en pocas palabras, que un acta administrativa es una “tarjeta amarilla” antes de un despido o para corregir conductas que pongan el peligro a los demás trabajadores en el centro de trabajo.
Funcionan para acreditar los motivos de sanción o rescisión, frente a las Juntas de Conciliación y Arbitraje. Para el caso de los trabajadores que se les rescinde su contrato de trabajo, sirven como prueba para analizar el perfil del trabajador involucrado, más allá de la causal que da la empresa.
En ocasiones, las actas sirven para que el empleador justifique la rescisión en caso de demandas por despido injustificado. |
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Esto debe tomarse muy en cuenta por el departamento de recursos humanos, para que se cumpla todos los requisitos y de eso depende su validez frente a una Autoridad. También es muy útil para dejar precedente de la advertencia y oportunidad que se le está dando al empleado para mantener una relación laboral adecuada.
Las sanciones que pueden establecerse en un acta administrativa son:
Un Acta Administrativa por si sola, No es el documento legal que por el que se permita dar de baja a un trabajador, así que no importa el número de actas que se levanten, las causas por las que se puede dar de baja a un trabajador está establecidas en la Ley Federal del Trabajo.
En consecuencia, la empresa debe siempre velar por los intereses de sus empleados, por lo que las actas administrativas deben tener ciertas características.
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